miércoles, 12 de octubre de 2011

LA HISTORIA DE MIS PATINES

Todo comenzó en vísperas de Navidad hace 12 años  cuando ansiosamente esperaba mi regalo por portarme bien y rezar todas los novenas. Llego el día que tantos niños esperan el momento de destapar los  regalos y ver las grandes sorpresas que reposaban en ese hermoso árbol de navidad, y esperaba que el regalo mas grande fuera el mío, empezaron a leer los nombres y repartían los regalos mas pequeños , ósea que aun tenia posibilidades de que este fuera el mío, acercándose cada vez al regalo mas esperado, eran 12:45 am y ya faltaba poco, ese era el problema de tener mucha familia y mas cuando repartían los regalos por orden alfabético y claro como es evidente yo era una de las ultimas .  
Cuando estaba a punto de quedarme dormida, en lo mas profundo de mis sueños escucha una voz que gritaba mi nombre, pensé: "si es mi nombre tengo que levantarme», cuando por fin pude hacerlo corrí  hasta el árbol y ahí estaba recibiendo el regalo mas grade de todos, lo destape con mucha alegría y era lo que espera unos hermosos patines que estaba añorando hace mucho tiempo y desde ese momento comenzó la travesía pase de tener los de cuatro ruedas a los de línea y seguí cambiándolos a medida que el mercado los iba mejorando y mas por estar en la liga de patinaje.          

Veía videos acerca de como hacían los patines y leía todo acerca de ellos, pero esto no duraría mucho tiempo, a medida de que iba creciendo le perdía el interés, me podía mas los nuevos juguetes de tecnología que salían y el consumismo que te llevaban a pensar que ya lo que tenias estaba pasando de moda y que era hora de cambiar. Así fue como llego a su fin el gusto por los patines, porque llego el mundo futurista donde solo tienes que mover un dedo para que todo se haga por si solo, dejando atrás las cosas que solíamos hacer que aunque fueran con grandes esfuerzos nos daba la satisfacción lo que hacíamos nosotros mismos, no volvimos dependientes del consumismo, sin ni siquiera leer la marquilla o el contenido del producto que estamos comprando; todo se nos volvió tan mecánico que parecemos robots en manos de quienes nos dirigen el Mercado,Que está a punto de llevar al mundo al limite de sus recursos por su mal manejo, por no pensar en el bienestar del ser humano, si no en cuanto nos vamos a ganar dedicándose hacer porquerías de mala calidad  que nos dañan. Solo espero recuperar la pasión por mis patines porque aun no es tarde y de las cosas que realmente si tenían valor. 


          

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